Al elegir una bolsa de filtro de polvo, debe prestar atención a muchos factores: como el material de la bolsa recolectora de polvo, la selección de las condiciones de trabajo y el diseño del tamaño. Uso húmedo y seco, nivel de eficiencia, limitación de espacio, nivel de presión, consumo de energía, etc. Otra pregunta que los ingenieros deben considerar es si comprar un sistema de eliminación de polvo estándar o configurar una solución diseñada a medida para su instalación. Este problema requiere una consideración cuidadosa y una revisión cuidadosa de las ventajas y desventajas de cada método.
Requisitos para la selección de la bolsa recolectora de polvo.
Uno de los factores más importantes en la cuestión de si está personalizado o ya hecho son los requisitos de procesamiento. Por ejemplo, si los gases de escape deben contener partículas contaminantes por debajo de un cierto umbral, y opta por utilizar una solución estándar, es posible que no cumpla con estos requisitos.
Los requisitos pueden incluir: requisitos para prohibir el uso de polvo de sílice, requisitos para la eliminación de polvo explosivo y material particulado como harina, y prohibiciones sobre la descarga de metales pesados, gases tóxicos y contaminantes ambientales al aire. Estos pueden requerir filtros especializados, patrones de flujo de aire, limitaciones de espacio físico y otras consideraciones que muchos sistemas estándar no pueden adaptarse.
Aplicación inusual de la bolsa de filtro del colector de polvo
Una forma especial de solicitar una solución personalizada podría ser si se requiere recuperación de material. Por ejemplo, su configuración implica el uso de titanio u otros metales preciosos que hayan sido cortados, pulidos o atomizados durante el procesamiento. En estos casos, el polvo generado es más que un simple desperdicio. Al contrario, es un material valioso y su recuperación es fundamental.
Para estos entornos, el reciclaje de materiales requiere un mayor nivel de diseño de equipos. La solución personalizada brinda la oportunidad de utilizar filtros / elementos, prefiltros, dispositivos de admisión y escape y colectores de polvo muy especiales para garantizar la filtración y captura de metales. Los sistemas estándar pueden carecer de estos componentes necesarios.